“Ruggeri cuenta cómo el fútbol le dio una segunda oportunidad: su reflexión sobre los retiros y la decisión de Russo de continuar dirigiendo”.
Publicado: 10 / 10 /2025La partida de Miguel Ángel Russo, a los 69 años, retumbó en el corazón del fútbol argentino. Este ícono de la dirección técnica de Boca Juniors se mantuvo al timón hasta sus últimos días, a pesar de que su salud había decrecido notablemente. La pasión lo llevó a aferrarse al deporte que amaba, incluso cuando ya no podía estar en la línea de juego.
En el programa ESPN, F90, Oscar Ruggeri expresó: “Su vida fue hasta el último día estar donde quería estar”. Recordó cómo, a pesar de los problemas de salud y las advertencias de quienes lo rodeaban, Russo eligió no rendirse. Ruggeri, campeón del mundo con Argentina en 1986 y amigo cercano, también señaló la analogía con César Luis Menotti, que había lidiado con sus propias frustraciones, al igual que otros grandes del fútbol, como Diego Maradona.
Tanto Ruggeri como el conductor Sebastián Vignolo reflexionaron sobre el desarraigo que experimentan los futbolistas al dejar la competencia. La pregunta resonó: ¿Qué hacen cuando se apagan las luces del estadio? Ruggeri continuó: “Del fútbol, y no te importa otra cosa que el fútbol, nos cuesta. Se empieza a vivir una especie de depresión, y así como nos ha pasado a muchos, llegas a sentir que el vacío te consume”. La vida de un jugador llega a ser tan intensa que alejarse puede resultar devastador.
Finalmente, es vital considerar cómo el despojo de su identidad futbolística afecta no solo a los jugadores, sino a todos aquellos que han permanecido en el círculo que idolatraban. Miguel Ángel Russo, con su legado y determinación, continúa siendo una inspiración y un recordatorio de que el verdadero amor por el fútbol, es un amor que perdura, incluso frente a la adversidad. A menudo, la vida les exige a los jugadores más de lo que están preparados para dar, pero siempre queda un hilo que los une, un último suspiro que resuena en cada partido, en cada recuerdo.
